Ficha técnica
Dirección: François Ozon
Guión: François Ozon
Fotografía: Pascal Marti
Música: Philippe Rombi
Dirección Artística: Pascal Leguellec
Reparto: Romain Duris (David/Virginia), Anais Demoustier (Claire), Raphael Personnaz (Gilles), Isild Le Besco (Laura).
Duración: 108 minutos
País: Francia
Año: 2014
Distribuye: Golem Distribución
Elena Tara
Durante la primera parte del filme disfrutamos de una elipsis que es un poema visual en la que los magníficos planos hacen el amor con la música de Philippe Rombi. Ya desde el comienzo te preguntas cómo consigue Ozon arrancar la carcajada general en una situación tan dolorosa y tan complicada. Una nueva amiga baila constantemente entre el drama y la comedia ácida y sin embargo en ciertos momentos vemos un thriller construido sobre situaciones tan cotidianas para una mujer como maquillarse, depilarse o arreglarse el pelo; si es que eso es posible, Ozon lo ha conseguido.
El espectador es capaz de saborear una tensión ingerida a pequeñas cucharadas que en ocasiones es incómoda y en otras, absolutamente divertida. La historia se va escribiendo sola de una manera sutil y elegante, presentándose con una naturalidad que conquista; llena de intimidad, en ocasiones excesiva; puedes olvidarte dentro de la sala de que estás viendo una película de ficción y puedes llegar a sentir que te has colado en un sitio donde no deberías estar, observando una situación de la que no deberías ser testigo.
Así llegamos a conocer y a querer a los protagonistas, excesivos, satíricos, en ocasiones esperpénticos, pero de alguna manera el director francés consigue que aceptemos por completo las reglas y juguemos con sus cartas. Te lo crees todo. Y te lo crees, porque ocurre, y nunca antes se había presentado con tanto buen gusto y con tanta naturalidad un tema tan complejo. La última obra de Ozon parece a veces el producto de la colaboración entre Hitchcock y Almodóvar explorando la complejidad de la mujer y de la identidad, presentando un mundo problemático y polémico y retratándolo con una ternura exquisita que llega al corazón del que lo mira.
Es una canción a la mujer y a la aceptación, sobre todo a la aceptación y el respeto de aquellos que nos rodean, sean nuevos amigos o totales desconocidos. Cabe resaltar la actuación de Romain Duris que es cuanto menos inusual y complicada. Por mi parte, sólo me queda decir chapeau a François Ozon, quien estoy segura tendrá que soportar muchas críticas por parte de los más cerrados de mente después de esta obra que le ha valido cinco candidaturas y el Premio de San Sebastián a Mejor Película el año pasado.
Dato cinéfilo
François Ozon ya tiene experiencia en recoger premios en nuestro país; Ya había ganado la Concha de Oro por En la Casa en 2012 en el Festival de Cine de San Sebastián y el premio TVE Otra Mirada por Joven y Bonita el año siguiente.